Fiestas de Moros y Cristianos

Las fiestas de Moros y Cristianos de Sax, tienen su origen en el año 1627, cuando los sajeños prometieron en un cabildo abierto celebrar "desde ahora y para siempre" la festividad del día de San Blas, para demostrarle su devoción y agradecimiento por haberles librado de una epidemia de "garrotillo". Este acuerdo se ratificaba en el referido cabildo, donde todo el pueblo se comprometió con dichos votos. Las fiestas en su origen no fueron más que una función religiosa en la iglesia y una serie de disparos de arcabuz en honor al santo.

A lo largo del pasado siglo, esta celebración fue evolucionando y desde 1942 duran cinco días (del 1 al 5 de febrero). La formación de comparsas se fue sucediendo desde finales del XIX, tras la aparición de la de Moros y Cristianos, incorporándose durante la década de 1860 la de Marruecos; en 1874 la de Garibaldinos; la de Turcos en 1920; en 1970 la de Alagoneses (en memoria de D. Artal de Alagón, caballero aragonés fallecido en Sax en 1239 en el primer intento de conquista cristiana y, que cristalizó con el hermanamiento de Sax con la villa de Alagón (Zaragoza); la comparsa de Árabes Emires apareció en 1973 y en 1989 la de Caballeros de Cardona. En la actualidad hay 3.500 festeros.

Uno de los símbolos históricos más característicos es la figura del Paje. Esta recae casi siempre en una niña de corta edad (entre cuatro y ocho años), y en las procesiones de arcabucería, tiene un papel importante, abriendo con su bastón y rodela la comparsa, dando frente al Capitán en cada tiro dirigido hacia él, evolucionando con unos acompasados pasos y movimientos tradicionales.

Los actos que componen las fiestas de Moros y Cristianos tienen una arraigada historia y tradición, desfiles, retreta, dianas, procesiones con arcabucería, acto del Predicador, procesión de San Blas, embajadas, música. En definitiva fiestas que deleitan a los que las visitan y en las que todo el pueblo está vinculado de una u otra forma a estas centenarias y tradicionales fiestas.